Escenarios aplicables
Una persona con una lesión suficientemente grave en una arteria puede morir desangrada en tres a cinco minutos, por lo que el público general necesita saber cómo detener la hemorragia.
En caso de hemorragia grave, la muerte puede ocurrir en 3 a 5 minutos.
Herida de bala
Una herida de bala (GSW) es una lesión penetrante causada por un proyectil (por ejemplo, una bala) de una pistola (normalmente un arma de fuego o una pistola de aire comprimido). El daño puede incluir sangrado, fracturas óseas, daño a órganos, infección de heridas, pérdida de la capacidad de mover parte del cuerpo y, en casos graves, la muerte.
Herida por apuñalamiento
Una herida por arma blanca es una forma específica de traumatismo penetrante en la piel que resulta de un cuchillo o un objeto puntiagudo similar. Si bien se sabe que las heridas por arma blanca suelen ser causadas por cuchillos, también pueden ocurrir por una variedad de implementos, incluidas botellas rotas y picahielos.
Cortar la herida
Un corte es una rotura o abertura en la piel. También se le llama laceración. Un corte puede ser profundo, liso o irregular. Puede estar cerca de la superficie de la piel o más profundamente. Un corte profundo puede afectar tendones, músculos, ligamentos, nervios, vasos sanguíneos o huesos.
Herida por explosión
Una lesión por explosión es un tipo complejo de trauma físico resultante de la exposición directa o indirecta a una explosión. Las lesiones por explosión varían desde lesiones de órganos internos, incluidas lesiones pulmonares y cerebrales traumáticas (TBI), hasta lesiones en las extremidades, quemaduras y lesiones auditivas y visuales.
Sangrado arterial/venoso
El sangrado arterial sale a borbotones, el sangrado venoso fluye de manera constante y el sangrado capilar sale del cuerpo.
La hemorragia arterial es el tipo de hemorragia más grave y urgente. Puede ser el resultado de una lesión penetrante, un traumatismo cerrado o daño a órganos o vasos sanguíneos.
Debido a que la sangre proviene de las arterias, se distingue de otros tipos de sangrado. Por ejemplo, la sangre es de color rojo brillante debido a que contiene oxígeno. También sale en chorros y pulsos, que se correlacionan con los latidos del corazón. Este tipo de sangrado puede ser difícil de controlar porque la presión del corazón que late significa que no coagulará ni se detendrá tan fácilmente.
El sangrado venoso es menos grave que el sangrado arterial, pero aun así puede poner en peligro la vida. Por este motivo, requiere atención médica inmediata.
Como la sangre proviene de una vena, es de color rojo oscuro. Esto se debe a que no contiene tanto oxígeno. Además, debido a que las venas no están bajo presión directa, la sangre fluye de manera constante pero sale con menos fuerza que en el caso de una hemorragia arterial.
Fractura abierta, combinada con hemorragia que pone en peligro la vida
Una fractura abierta es una lesión en la que el hueso fracturado y/o el hematoma de la fractura quedan expuestos al entorno externo a través de una violación traumática de los tejidos blandos y la piel. La herida cutánea puede encontrarse en un lugar distante de la fractura y no directamente sobre ella. Por tanto, cualquier fractura que tenga una herida concomitante debe considerarse abierta hasta que se demuestre lo contrario.